Nuestro conocimiento del Universo se ve constantemente puesto a prueba por nuevos hechos y fenómenos inexplicables, cuyo significado los científicos aún no han llegado a comprender. Este año, los astrónomos han registrado y establecido nuevos récords, como nos recuerda Space.com.
- En el año saliente, los astrónomos detectaron una potente explosión de rayos gamma en el Sol que batió todos los récords. Si los anteriores rayos más potentes alcanzaron los 200 GeV, esta vez la energía de las partículas subatómicas de los rayos gamma solares se midió en 1 TeV, y algunas de ellas alcanzaron los 10 TeV. En otras palabras, eran al menos 5.000 veces más brillantes. Los científicos no saben con certeza qué causó brotes tan potentes.
- En las ondas de radio de una galaxia de 8.800 millones de años, los astrónomos pudieron discernir trazas de hidrógeno neutro. Normalmente esto no es posible, pero en este caso los científicos tuvieron suerte: la luz de la galaxia fue amplificada por la lente gravitatoria en un factor de 30.
- El helicóptero marciano de la NASA, único en el planeta, realizó en septiembre su vuelo número 59, el más largo de su cuenta: recorrió 579 metros por el aire. Luego, en octubre, repitió este logro.
- En el año saliente también se descubrieron las estrellas que huyen más rápido. Esta clase de estrellas ya se caracteriza por una mayor velocidad en relación con el medio interestelar circundante, pero dos de ellas -J0927-6335 y J1235-3752- resultaron ser las más rápidas. Recorren 2285 y 1694 km por segundo, respectivamente, y pronto entrarán en el espacio interestelar. Los astrónomos sospechan que estas enanas blancas formaron en su día un sistema estelar doble.
- Los agujeros negros conocidos por la ciencia se dividen en dos categorías: los de masa estelar, formados a partir de supernovas, y los supermasivos, con una masa de millones o miles de millones de estrellas, que suelen encontrarse en el centro de las galaxias. Un equipo internacional de científicos ha descubierto la primera prueba de la existencia de un agujero negro con una masa no estándar de 10 a 100 millones, cuya edad es de 13.300 millones de años. Los científicos aún no saben cómo se formó.
Fuente
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