Una torre de 30 metros se imprimirá en Suiza en 900 horas
El edificio más alto del mundo impreso con una impresora 3D aparecerá en un pueblo suizo. La torre barroca blanca, creada por investigadores de la ETH de Zúrich, constará de 102 columnas y tendrá 30 metros de altura. Tendrá cinco plantas y un espacio para espectáculos en la parte superior. El proceso de impresión durará 900 horas, es decir, algo más de un mes. Otra característica del diseño es que será plegable.
La Torre Blanca se está creando en colaboración con la institución cultural Nova Fundaziun Origen. Se imprime por partes y luego se transporta y monta en la obra, en el pueblo de Mühlen, en los Alpes suizos.
La torre, de 30 metros de altura, será de estilo barroco. Las columnas impresas en 3D soportarán cinco plantas y formarán una fachada semiabierta. También se instalará una membrana ligera desmontable para proteger el interior de las inclemencias del tiempo en caso necesario.
Cada planta será más luminosa y espaciosa que la anterior. Una escalera de caracol conduce a la cima. La culminación será una sala en la planta superior con un escenario y asientos para 45 visitantes. Este espacio acogerá pequeños conciertos y representaciones teatrales.
El proceso de impresión en sí debería durar 900 horas. La tecnología es similar a la de otros proyectos arquitectónicos impresos en 3D: impresoras 3D robotizadas exprimen una mezcla blanda similar al cemento por capas desde una boquilla para crear la estructura básica de las distintas partes de la torre para su montaje.
Toda la estructura de la torre se diseñó con un software especial que permite una geometría precisa y hace que toda la estructura sea plegable. Durante el proceso de construcción se crearán 102 postes impresos individuales. Los elementos se rellenarán de hormigón sólo cuando sea necesario por diseño, lo que reduce significativamente el consumo de material. Este método de construcción evita el uso de encofrados para verter el hormigón y minimiza los residuos.