Los rusos roban señales de navegación en Estonia – medios de comunicación
El Ministerio de Asuntos Exteriores estonio pide calma ante el incidente. Este caso se inscribe en la práctica de provocaciones inherente a Rusia.
En la noche del 23 de mayo, la guardia fronteriza rusa retiró 24 boyas flotantes instaladas en aguas estonias del río Narva por la guardia fronteriza para marcar el paso. Así lo informó ERR.
Cabe señalar que, dado que el cauce del río cambia con el tiempo, cada primavera Estonia y Rusia vuelven a instalar boyas en el río para marcar el paso. Y mientras antes el establecimiento era de mutuo acuerdo, desde 2023 Rusia no está de acuerdo con las posiciones estonias.
“Decidimos colocar las señales flotantes para la temporada de verano de conformidad con el acuerdo de 2022 porque son necesarias para evitar errores de navegación, de modo que nuestros pescadores y veraneantes no entren por error en aguas rusas”, declaró Erik Purgel, jefe de la Oficina de la Guardia Fronteriza de la prefectura de Idaho, señalando que las primeras 50 boyas se instalaron el 13 de mayo.
Este año, Rusia no ha estado de acuerdo con la ubicación de aproximadamente la mitad de las 250 boyas, y el jueves por la noche, los guardias fronterizos estonios descubrieron que los guardias fronterizos rusos habían retirado 24 de ellas.
El Departamento de Policía y Guardia de Fronteras se puso en contacto con el Servicio de Guardia de Fronteras ruso y exigió aclaraciones sobre la retirada de las boyas y su devolución, esperando pruebas de la Federación Rusa de que el canal previamente acordado había cambiado. Y si no se proporcionan, la parte estonia, como se ha señalado, seguirá instalando boyas.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores, Margus Tskakhkna, añadió que el incidente debía tratarse con calma, ya que las acciones actuales de Rusia se inscriben en el esquema provocador que ha venido utilizando en los últimos años.
