Las Fuerzas Aéreas de EE.UU. demuestran por primera vez el vuelo del último avión no tripulado de ataque y reconocimiento X-67A.
Las Fuerzas Aéreas estadounidenses han publicado un vídeo del primer vuelo del dron de demostración XQ-67A. El éxito del vuelo del XQ-67A supone un gran avance en el programa de las Fuerzas Aéreas estadounidenses para automatizar una parte significativa de su flota.
El XQ-67A es un vehículo aéreo no tripulado Off-Board Sensing Station (OBSS), pero el AFRL también ha presentado otro concepto, el Off-Board Weapon Station (OBWS), que compartirá chasis con el OBSS pero será “más rápido y eficiente”, más maniobrable y con mayor alcance.
El objetivo de estos conceptos no es sólo ayudar a desarrollar drones Loyal Wingman capaces de trabajar con aviones de combate tripulados como plataforma de un solo uso para operaciones de reconocimiento y ataque, sino también hacerlo utilizando tecnologías de diseño y fabricación de automóviles. Esto permitirá que un dron se convierta en la base de toda una familia de drones.
Basado en el XQ-58A Valkyrie, el XQ-67A está diseñado para trabajar con los proyectos X-62 VISTA y F-16 VENOM del Centro de Pruebas del Ejército del Aire para avanzar en el desarrollo de sistemas aéreos autónomos tanto para drones como para aeronaves tripuladas.
El objetivo es crear una flota de drones que transforme a los pilotos de cazas en altos dirigentes más preocupados por el cumplimiento de la misión que por pilotar drones o incluso combatir.
Las pruebas tenían por objeto no sólo comprobar los sistemas de vuelo, sino también la seguridad del dron. Los vuelos se realizaron por control remoto, aunque el grado de autonomía aumentará en el futuro.
