Escasez de trabajadores: Japón planea sustituir a 11 millones de personas por avatares, robots e IA para 2040
Japón se enfrenta a una importante escasez de mano de obra, que se calcula alcanzará los 11 millones de personas en 2040, y está recurriendo a soluciones innovadoras como avatares, robots e inteligencia artificial para abordar este problema en sectores clave como la construcción, el transporte por carretera, la agricultura y el comercio minorista.
Así lo informó el Financial Times.
La Exposición Universal de Osaka, prevista para la primavera de 2025, es un buen ejemplo del impacto de esta crisis en el mercado laboral, con retrasos en la construcción por falta de trabajadores. La escasez de mano de obra afecta a varios aspectos de la economía de servicios japonesa, como la falta de carritos de comida en los trenes de alta velocidad y las máquinas expendedoras vacías.
Shoto Furuya, del Instituto de Contratación, subraya que la escasez de mano de obra en Japón es un problema persistente que afecta a los servicios básicos y las infraestructuras sociales. El envejecimiento de la población, de la que casi el 30% tiene más de 65 años, agrava el problema.
Japón se ha apoyado tradicionalmente en las mujeres y los trabajadores de más edad, pero esto ya no es suficiente. La respuesta del país a esta crisis laboral está siendo observada con atención, especialmente en China, que se enfrenta a un reto demográfico similar.
En la construcción, el número de trabajadores ha disminuido un 30% desde 1997, y sólo el 12% de ellos tiene menos de 29 años. Las nuevas normas laborales que limitan las horas extraordinarias de los trabajadores de la construcción y los camioneros están obligando al sector a adaptarse. Debido a este déficit, el coste de la Exposición Universal de Osaka se duplicó hasta superar los 1.600 millones de dólares.
Empresas como Toggle están introduciendo robots industriales para automatizar los procesos de la construcción que requieren mucha mano de obra. Del mismo modo, el fabricante de confitería Lotte está cambiando los camiones por trenes para entregar sus productos en previsión de la escasez de conductores.
En agricultura, se utilizan robots como Raicho 1 para desherbar los arrozales, lo que reduce considerablemente las horas de trabajo humano. Sin embargo, la autosuficiencia de Japón en la producción de alimentos se ve amenazada a medida que aumenta el número de tierras de cultivo abandonadas y envejece la población agrícola.
Los minoristas también se están adaptando: se están probando avatares en las tiendas, que son controlados a distancia por los empleados. Este planteamiento ayuda a dotar de personal los turnos de noche en las zonas rurales, resolviendo el problema de la grave escasez de empleados en las tiendas de conveniencia.
La escasez de mano de obra está impulsando el cambio de Japón hacia la tecnología y la automatización, y los avatares, los robots y la inteligencia artificial parecen llamados a desempeñar un papel crucial en el sostenimiento de la economía y el estilo de vida del país en un futuro próximo.