El láser portátil Fractl destruye objetos del tamaño de una moneda a una distancia de hasta 1.000 metros
El Ministerio de Defensa australiano ha hecho una demostración del arma láser portátil de alta energía más potente del mundo, capaz de derribar drones con gran precisión.
Los drones se han convertido en una seria amenaza, por lo que se están desarrollando nuevos medios para combatirlos, y los láseres se están convirtiendo en una incorporación cada vez más atractiva al arsenal bélico. La ventaja de los láseres es que alcanzan objetivos a la velocidad de la luz con un número infinito de disparos a un coste de un dólar por disparo.
Australia ha presentado el láser portátil de alta energía Fractl, desarrollado por AIM Defence. El nuevo sistema, que pesa menos de 50 kg, ha sido probado con éxito por el Ejército australiano en un campo de tiro.
Las pruebas se realizaron junto con armas convencionales contra drones. Mientras que esta última consumía mucha munición y a menudo no destruía los objetivos que se acercaban hasta que alcanzaban corta distancia, el arma láser funcionaba silenciosamente, destruyendo drones.
Según el fabricante, Fractl puede funcionar tanto con batería como con corriente alterna y está diseñado para diversas opciones de respuesta de drones. El láser puede destruir un objeto del tamaño de una moneda de diez centavos que se desplace a 100 km/h a una distancia de 1.000 m o quemar sensores a una altitud de 1.500 m. Es silencioso y los soldados pueden aprender a utilizarlo en cuestión de minutos.
Fractl también puede reaccionar cegando los sensores o causando daños luminosos. El láser puede apuntarse con precisión mediante un controlador manual que permite al operador elegir a qué parte del dron apuntar para obtener el máximo efecto.
“Pulsas un botón para seguir al dron y el ordenador se hace cargo, luego pulsas otro botón para apretar el gatillo, como en un videojuego”, dijo el cabo. “Con el dedo índice se puede cambiar rápidamente la mira entre la cámara de vídeo del dron, la masa central o una de las hélices. Solo se tarda unos segundos en desactivar la cámara y dos o tres segundos en desactivar el rotor”.
Este control preciso permite al láser realizar ataques de gran precisión, cortando cables o quemando explosivos, y lograr una destrucción completa con una potencia descrita como inferior a la necesaria para hervir una tetera. El sistema de selección de objetivos puede gestionar tanto ataques individuales como de grupo. Además, el diseño del láser no daña a las personas.