Un soldado ucraniano “entrega” munición al frente ucraniano mientras se retrasa la ayuda occidental – WSJ
El Wall Street Journal publicó un extenso artículo sobre un valiente soldado ucraniano que suministra munición tanto al ejército ucraniano como a Occidente. En la orilla de un arroyo de un pueblo ucraniano devastado, Max Polyukhovych, un soldado de 36 años, escarba en el barro en busca de proyectiles de artillería rusos sin usar. Esta actividad fue su forma de ayudar a Ucrania ante la aguda escasez de municiones por los retrasos en los suministros militares procedentes de Estados Unidos.
Según el periódico, Polyukhovych, conocido por su indicativo “Mad Max”, se ha convertido en una fuente indispensable de munición para las brigadas ucranianas del frente oriental, a las que ha suministrado al menos 14.000 proyectiles y 4.000 municiones para drones. Según él, los mandos piden constantemente más munición debido a la grave escasez de proyectiles de artillería.
Polyukhovych se embarca en una peligrosa búsqueda a través de campos de minas y pantanos, encontrando restos de munición rusa. Utiliza los explosivos que encuentra para fabricar munición para drones de ataque, que se están convirtiendo en una pieza clave de la defensa de Ucrania.
A pesar de la enorme contribución de Polyukhovych, el ejército ucraniano dispara actualmente muchos menos proyectiles al día de los necesarios para contrarrestar eficazmente a las fuerzas de ocupación rusas, que aprovechan los retrasos y las vacilaciones occidentales para apoderarse de más territorio ucraniano y matar a miles de ciudadanos ucranianos. Los informes sobre el aumento de la producción de munición de 152 mm en Ucrania son alentadores, pero persiste el problema del suministro de proyectiles occidentales de 155 mm. Ucrania no puede producir 155 mm por su cuenta debido a los acuerdos de licencia entre los países occidentales y los fabricantes exclusivos de este calibre.
Polyukhovych, que lleva ocho años combatiendo en la guerra del este de Ucrania, resultó herido el verano pasado, pero en lugar de descansar, se ha centrado en la producción de munición. Él y su equipo trabajan en un laboratorio improvisado, convirtiendo minas y proyectiles encontrados en munición para drones.
El trabajo de Polyukhovych conlleva un riesgo significativo. Hace poco, la explosión de una mina mató a uno de sus ayudantes. No obstante, continúa su misión formando a otros desminadores para localizar y utilizar eficazmente las municiones rusas abandonadas.
“Mad Max” y su equipo aprovechan cualquier oportunidad para reforzar las capacidades defensivas de Ucrania, volviendo la munición rusa contra los rusos y proporcionando a las tropas ucranianas la munición necesaria en este momento crítico.
