Los científicos revelan un secreto clave de las pirámides egipcias
Las civilizaciones antiguas son reacias a revelar sus secretos. Las pirámides egipcias están consideradas una de las maravillas del mundo por algo. Los científicos aún debaten cómo se construyeron en el tercer milenio a.C. y en medio de un desierto arenoso.
IFLScience recuerda que las pirámides se construyeron con enormes bloques de piedra de varias toneladas de peso, apilados unos sobre otros sin argamasa.
¿Cómo consiguieron un acabado tan puro como una joya? ¿Cómo conseguía la piedra de las canteras, que estaban muy lejos de la obra? ¿Cómo se levantaron los gigantes y se armaron los “rompecabezas”?
Hay muchas preguntas, y no todas tienen respuestas claras y fiables. Pero parece que los científicos han encontrado una explicación muy probable para uno de los principales misterios. Las imágenes por satélite ayudaron a encontrar un canal cubierto de arena de un antiguo río desaparecido hace mucho tiempo en la zona de las pirámides.
No es sólo un brazo del Nilo, sino un río en toda regla comparable en anchura a su cauce “padre”. El erudito Eman Goneim presta especial atención a esta versión. Este brazo fluía a través de la ciudad de Giza, ayudando a regar numerosos campos de agricultores.
Con el tiempo, el cauce se secó y los científicos le dieron el nombre de Ahramat, que se traduce como “La rama de la pirámide”. Al mismo tiempo, servía de vía fluvial para transportar los mismos bloques destinados a las tumbas de los faraones. La longitud total del río alcanzaba los 100 km, era muy sinuoso, según los científicos, y pasaba junto a las 38 pirámides.
Queda por ver en las próximas excavaciones si las propias estructuras se colocaron más cerca de las curvas o si los antiguos constructores ajustaron el canal de acuerdo con los planos de construcción.